Quiero ser sincera al escribir este artículo, lo que mi persona con la preparación que había recibido en el arte de educar vivió al llegar a esta Institución.
Amé educar desde el inicio de mi formación al estar en contacto con los niños, al reconocer el efecto tan grande que se causa en la vida de quienes formamos, valorando todo la historia que cada pequeño ser tiene y está construyendo. La experiencia de trabajar en distintos contextos sociales y educativos generó amplias expectativas en mi persona sobre el fin último de la educación. Los libros y las teorías que se aprenden en el trayecto formativo de un docente giran en el interior de cada mentor esperando la oportunidad de vivir en plenitud el arte de educar, y en ese trayecto, hay obstáculos que se interponen para lograr el éxito. Al llegar a British aprendí que toda la experiencia adquirida en mi larga carrera educativa había llegado al lugar correcto para ponerla en práctica.
Educar con amor, esa era la clave, ¿Pero cómo desestigmatizar sin caer en prejuicios antepuestos por contextos religiosos o culturales? ¿Cómo se educa con amor sin caer en términos que sean alcanzables a la limitante de un credo religioso o una cultura en específico?
British American School compartió conmigo la gran oportunidad de combinar el currículo que el Sistema Educativo Nacional en este país posee, con el descubrimiento de un nivel superior, algo validado a nivel internacional, el Perfil de la Comunidad IB llevando a la práctica cada uno de los atributos: Indagador, Informados e instruidos, pensadores, buenos comunicadores, mentalidad abierta, audaces, solidarios, equilibrados e íntegros. Con la mención de éste último atributo de la lista, se proyecta al mundo una generación que va más allá del currículo, una generación que tiene a su alcance la oportunidad de encontrar aquello que es su talento y brillar en un mundo con tanta exigencia sin desviar de su meta el ser fiel a lo que en esencia como ser humano tiene. Poniendo al alcance la modernidad de un mundo cambiante y retador para el uso de la tecnología, el desarrollo de la creatividad y de las artes. Sí, llegamos al punto, un crecimiento integral que te posibilita tener éxito en el mundo profesional, feliz de haber vivido una construcción magnificante de tus virtudes y comprensivo con tus áreas de oportunidad. British es una gran oportunidad para vivir y disfrutar una educación de calidad.
Mtra. Luz del Alba Quen Pérez.
